Longitud: 8,22 Kms.
Altitud: 540 Mtrs.
Desnivel: 538 Mtrs.
Coef.APM: 123
Desnivel medio: 6,55%
Subida muy interesante, y por sus números, más difícil que su hermana la de O Viso. Podemos dividir en dos partes esta nueva ascensión, una primera hasta el kilómetro 5,5 realmente dura, con porcentajes bastante mantenidos entorno al 9%, excepto quizás los primeros 500-600 metros, y una segunda parte, mucho más sencilla de afrontar al ser ésta bastante llanita, aunque podemos sufrir los embates del viento cuando sople con fuerza, que si lo hace del sur-suroeste nos ayudará, pero si lo hace con cualquier otra componente, nos lo pondrá difícil, sobretodo si sopla fuerte del norte.
El comienzo de esta nueva escalada a una cima de la comarca del Barbanza... del norte, o sea, la que está al otro lado de la ría de Muros y que sin ser geográficamente la sierra del Barbanza, sí pertenece a esta Mancomunidad, está en el lugar de Portugalete, junto a la preciosa villa de Muros, y en la parroquia de Serres, por cuya iglesia pasaremos al poco de iniciarnos en esta nueva empresa. El tramo urbano será corto, hasta una segunda rotonda, a la izquierda de la cual queda el cementerio municipal.
Rotonda en la que iniciaremos la subida a Paxareiras |
Como se ve en la foto anterior, inicamos esta nueva escalada casi al nivel del mar, en una rotonda en la que nosotros deberemos tomar por la AC-400 que nos llevaría hasta Santa Comba, dejando a la izquierda la carretera que nos llevaría a Corcubión y Fisterra y a la derecha, la que nos llevaría a Noia y Compostela.
La calidad del asfalto va a ser en todo momento impecable, la calzada es muy ancha, no en vano durante buena parte del trayecto cuenta con carril para vehículos lentos, la señalización es completa tanto en la vertical como en la horizontal, y el tráfico es bastante escaso, siendo más abundante en el verano. Las sombras serán más bien escasas. Fuentes no vi ninguna a lo largo de toda la subida.
Paso entre viviendas por la zona de Serres |
Cuando iniciamos la subida, ya nos damos cuenta de que la tarea no va a ser muy fácil que se diga. Ante nosotros aparece una mole granítica cuya ladera deja bien a las claras, que para poder hacer cumbre vamos a tener que afrontar rampas con porcentajes nada desdeñables. Nuestras sospechas serán confirmadas una vez que dejemos atrás la rotonda que hay a la salida de Serres, donde se nos aparece una señal diciendo que durante cuatro kilómetros, tendremos unas rampas del 10%. ¡¡Buff!!
Tras la rotonda del cementerio, comienza lo bueno |
El que avisa no es traidor |
Esta carretera esta arreglada muy recientemente, y en dicha mejora, han quitado muchas curvas cerradas que había antes. Para los conductores esto quizás sea una mejora, quizás no, seguro, pero a la subida, desde un punto de vista cicloturista le ha quitado encanto, ya que han desaparecido unas curvas de herradura, que sobre una bici siempre se disfrutan, para convertirlas en largas rectas, que pueden hacerse interminables. Esto trae consigo además, que la pendiente se endurezca considerablemente. Ahora bien, si lo que nos gusta de la bici es coger grandes velocidades en los descensos, aquí tendremos cancha de sobra para disfrutar, y si el aire pega del nordeste, ni te cuento.
Largas rectas, al principio abrigadas por taludes |
Enseguida quedaremos a merced del sol y de los vientos |
En la anterior toma, se ve ya como quedamos desprotegidos ante el sol y el viento una vez que desaparezcan esos taludes del principio. Por suerte, el estado del firme sigue siendo perfecto. También en esa imagen se ve a la derecha un camino señalizado que nos llevaria hasta la aldea de Eiroa, pero ese mejor dejarlo para otro día y disfrutarlo andando o con la BTT.
Al fondo las antenas sobre el alto de As Forcadas |
En esta última imagen se pueden ver las antenas que coronan la cima del monte As Forcadas, y aunque parezca imposible por lo que se ve en la fotografía, subiremos más alto de lo que están esas antenas. Por cierto, no confundir As Forcadas, con Os Forcados, otra CIMA considerable que se encuentra justo enfrente, pero al otro lado de la ría, en plena Sierra del Barbanza.
Poco antes de llegar a la zona más fácil, la carretera serpenteará un poco |
Cuando veamos que la carretera empieza a serpentear un poco, quiere decir que nos estamos acercando a la parte más fácil de toda la subida, con partes incluso llanas, que por veces nos harán creer que ya hemos coronado, pero no es así, todavía vendrán algunas rampitas, aunque ya no tan serias como las anteriores, pero desde esa señal de animales sueltos, hasta esa parte "más llevadera" todavía tendremos que hacer frente a rampas por encima del 9% como las que salen en las siguientes fotos.
Zona de frenado de emergencia para los vehículos que bajan |
Pintadas de ánimos a un coleguilla mío de Noia |
Como ya comenté antes, tras esta zona de serpenteo, la cosa se va a poner mucho más suave. La parte final de la zona dura, tiene unos pequeños taludes a ambos lados de la carretera, que en cuanto desaparezcan, a la vez que el carril para vehículos lentos, practicamente habremos completado nuestra empresa, tan solo unos pequeños escollos antes del mirador nos harán ganar algo más de altura.
Final de la parte dura |
En la zona llevadera, pedalearemos entre algo de arbolado y los aerogeneradores del Parque Eólico Paxareiras B-II. A nuestra izquierda aparecerán las primeras vistas sobre el ancho Atlántico, y al fondo, internándose en sus aguas el impresionante cabo del Finisterrae romano.
Serpenteando en la parte alta |
Vistas sobre el Atlántico, y al fondo Fisterra y el Olimpo Celta |
Pues prueba superada. Subida un tanto atípica en cuanto a la hora de coronar un puerto gallego, ya que salvo que en el alto giremos a la izquierda para descender hacia Carnota, si seguimos por la misma carretera apenas tendremos descenso, ya que ante nosotros aparecerá una gran penillanura, que ronda los 400-450 metros de altitud, y cuyos límites geográficos se pierden en el horizonte.
Recta antes de llegar al mirador. |
Una vez en el alto, ya solo nos queda disfrutar de las fantásticas vistas sobre la playa de Carnota, la más grande de Galicia, y los lugares de Lira, Caldebarcos, Fisterra...
Vistas sobre la playa de Carnota |