DATOS TÉCNICOS:
En la imagen anterior se ve un tramo de la primera parte de la ascensión. Como se ve el ancho es más que aceptable, y aunque en el momento de tomar la imagen no había coches circulando, la tónica dominante no es esta. Al ser casco urbano las sombras no son muy abundantes en este primer tramo.Tras una zona de llano, donde ya aparece el arbolado, "enganchamos" con la carretera principal, la AC-543. A partir de aquí, el ancho de la vía aumenta, aunque el arcén sigue sin aparecer, eso sí, iremos con carril para vehículos lentos. Desde aquí el tráfico sigue siendo muy abundante, quizás incluso más, sobretodo en los meses de verano, ya que esta carretera es la que une la capital gallega con las playas de Noia, Porto do Son y Muros. La autovía proyectada para el 2011, tras la elecciones autonómicas del 1 de marzo, ha quedado reducida a una Vía Rápida, por lo que la esperada reducción de tráfico va a ser mucho inferior a lo esperado, pero algo se reducirá, de momento habrá que ir con mil ojos.
Longitud: 9,5 Kms.
Altitud: 494 metros.
Desnivel: 483 metros.
Coef. APM: 88
Desnivel medio: 5,08%
La subida al Monte Culou, es una ascensión no muy dura, la cual guarda su rampas más fuertes para el final, por lo que no conviene crecerse demasiado en los primeros desniveles al verlos un tanto livianos.
El inicio lo tenemos en la bella localidad de Noia, la cual debe su nombre a Jafet, hijo de Noé el cual atracó aquí tras el diluvio universal.
En Noia deberemos iniciar nuestra empresa junto a la alameda de la villa, en dirección hacia Compostela, y todavía en el casco urbano empezaremos ya a subir. Al poco de salir de Noia, llegaremos a la aldea-barrio de A Fialla. Por aquí la carretera es ancha, y con buen asfalto, pero carente de arcén y hay que tener cuidado con el tráfico, que es bastante elevado. La señalización es correcta tanto la horizontal como la vertical.El inicio lo tenemos en la bella localidad de Noia, la cual debe su nombre a Jafet, hijo de Noé el cual atracó aquí tras el diluvio universal.
En la imagen anterior se ve un tramo de la primera parte de la ascensión. Como se ve el ancho es más que aceptable, y aunque en el momento de tomar la imagen no había coches circulando, la tónica dominante no es esta. Al ser casco urbano las sombras no son muy abundantes en este primer tramo.Tras una zona de llano, donde ya aparece el arbolado, "enganchamos" con la carretera principal, la AC-543. A partir de aquí, el ancho de la vía aumenta, aunque el arcén sigue sin aparecer, eso sí, iremos con carril para vehículos lentos. Desde aquí el tráfico sigue siendo muy abundante, quizás incluso más, sobretodo en los meses de verano, ya que esta carretera es la que une la capital gallega con las playas de Noia, Porto do Son y Muros. La autovía proyectada para el 2011, tras la elecciones autonómicas del 1 de marzo, ha quedado reducida a una Vía Rápida, por lo que la esperada reducción de tráfico va a ser mucho inferior a lo esperado, pero algo se reducirá, de momento habrá que ir con mil ojos.
A continuación, imagen tomada en el momento en el que la AC-311 se une a la AC-543 que nos llevará hasta casi la cima de Culou, y si lo deseamos, hasta la ciudad de Compostela.Desde este momento, nos encontraremos rampas bastante mantenidas, no siendo en ningún momento muy duras, de hecho, en ningún momento llegarán al 10%.
Al poco de coger este vial, llegaremos a una gasolinera, y en frente de ella una fuente. Es mejor que lleguemos con agua, ya que cruzar la carretera para coger el líquido elemento puede ser muy latoso, y es mejor que sigamos nuestra empresa pegaditos a la derecha. Poco después llegaremos a la altura de una hormigonera, y sale un cruce a la izquierda hacia Liñaio y el Hotel Pesquería del Tambre, el cual está enclavado en un lugar muy pintoresco junto al río que le da nombre y que si tenemos ocasión, podríamos visitar, además, para salir de dicho hotel hay una bonita subida, la cual ya subiré la altigrafía más adelante. Merece la pena visitar la zona. En esta imagen, se ven perfectamente las características de la carretera por la que debemos circular, ancha, bien asfaltada, y con la señalización horizontal bien marcada. Los cruces de esta vía tampoco son muy peligrosos, ya que están bien señalizados y van hacia aldeas muy poco habitadas.
A la altura del kilómetro 6, a la izquierda de la vía, hay otra fuente, pero como ya expliqué al hablar de la anterior, es preferible llegar con agua para no tener que atravesar la carretera. Un kilómetro después, llegaremos a la aldea de San Xusto, pequeña localidad, en la que se encuentra el Monasterio de Toxosoutos, a la derecha de nuestro devenir, y enclavado en un paraje de ensueño. Los monjes nunca fueron los más tontos y siempre supieron donde "hacerse las casitas" en este caso junto a unas cataratas en el río San Xusto. Un sitio de ensueño. Al poco de dejar atrás San Xusto, y cuando parece que llegamos al final por que desaparecen las rampas, nosotros deberemos girar a la derecha, al llegar a la altura del cruce que se ve en la anterior fotografía y que como se puede ver está señalizado como Mirador de Culou. Desde aquí las características de la vía cambian radicalmente. Pasamos a discurrir por una pequeña pista, estrecha, sin señalización, sin tráfico alguno y sin sombras debido, ¡cómo no! a un incendio forestal, eso sí, la calidad del asfalto no va a ser impedimento para que lleguemos arriba junto a las antenas del repetidor.
Otra característica de esta última parte, la cual consta aproximadamente de un kilómetro, es que tiene rampas duras, ahora si que pasaremos a desniveles superiores al 10%, practicamente en su totalidad, por lo que deberemos llegar con fuerzas y no haber quemado todas anteriormente dejándonos llevar por la suavidad de las rampas anteriores.
Tras el último esfuerzo, nos veremos recompensados con bonitas vistas sobre la Ría de Muros e Noia, y de los montes de esta parte de la bella Sierra del Barbanza.
A continuación, imágenes de ese último kilómetro, y de las vistas que tenemos desde la cima.