Enxa por Xuño e Cabrais

DATOS TÉCNICOS:
Longitud: 12,98 Kms.
Altitud: 528 Mtrs.
Desnivel: 514 Mtrs.
Coef. APM: 103
Desnivel medio: 4,8%

Subida bastante cómoda, y por una zona que en cuanto al paisaje es distinto a la mayoría de las subidas que hay por esta zona. A excepción del alto, cambiamos las vistas sobre el mar, por el rodar por zona boscosa y entre tierras de labradío y encajonados por un valle interior del Barbanza.

Si bien comenzaremos muy cerquita del mar, próximos a la Playa das Furnas, conocida por ser donde Ramón Sampedro se quedó tetrapléjico e inició su lucha en favor de la eutanasia y que Alejandro Amenábar llevó posteriormente al cine con gran éxito.

Que me voy por los cerros de Úbeda... y por donde hay que ir es por la C-550. Si vamos desde Ribeira hacia Noia, al poco de dejar atrás Xuño, cruzaremos un puente sobre el río Sieira, donde se iniciará la ascensión. 150 metros más adelante, deberemos girar a la derecha en dirección hacia Cabrais y A Madalena. La carretera que nos encontraremos será estrecha y algo rugosa, pero en buen estado. No hay arcén y la señalización es muy escasa. Son numerosos los cruces sin señalizar, pero nosotros deberemos ir por este vial hasta que veamos los tejados de la aldea de Cabrais, bajando ya el alto del mismo nombre.
En este primer tramo iremos un poco a merced del sol, ya que la vegetación es muy escasa hasta casi el primer alto. Hay pinos y eucaliptos de repoblación, pero son todavía muy pequeños y no dan la sombra necesaria.

Las rampas son bastante asequibles, apenas llegan al 8%, pero aquí si se pueden unir varios factores para ponernos en un brete, y son lo que agarra el asfalto y que pegue el aire, si bien de frente solo nos podría dar con fuerza en algún pequeño tramo, de costado es muy normal que pegue y puede llegar a ser muy molesto.

Primer tramo de la ascensión al alto de Cabrais

Estos árboles son todavía pequeños para proporcionar buenas sombras.

En esta parte el aire puede pegar con fuerza. Al fondo A Curota-Os Forcados.

En definitiva, llegar al alto de Cabrais, no es nada difícil, y es la parte fea de este "dueto" de subidas en el Barbanza.
Una vez coronada esta primera parte, nos lanzaremos en un descenso de unos 2,5 kilómetros, con alguna rampa bastante pronunciada y con una curva de vaguada al poco de comenzar el descenso, que es donde el paisaje empieza a ganar en belleza poco a poco.
El hecho de poner esta ascensión como una sola, no es que quiera imitar a otras míticas del ciclismo como pueda ser una del tipo Lautarets-Galibier o Galibier con Telegraphe, o Soudet con Pierre de St. Martin; lo he hecho porque si queremos subir Enxa por esta vertiente es casi impepinable tener que enfrentarse primero con Cabrais, así que, como nos vamos a encontrar con los dos, si o si (salvo que se conozca el sinfín de cruces y giros que hay que hacer por las aldeas), pués he decidido unirlas en uno.

Larga recta, pero con desnivel muy escaso.

Tras esa curva, se corona el alto de Cabrais

Poco antes de llegar a Cabrais, como ya indiqué anteriormente, debemos realizar un giro a la izquierda, que está sin señalizar, adentrándonos en un bosque casi exclusivo de eucaliptos, por una carretera más estrecha que la anterior, y con alguna parte levantada por mor de las raíces de los árboles. Ahora la sombra va a ser densa, ya que hay muchos árboles, muy próximos entre si y con una altura considerable.

Momento en el que debemos realizar el giro a la izquierda. Nosotros vendríamos de donde marca el indicador.

Bonita pista por la que iremos hasta la Ermita de la Madalena

Por la estrecha pista que se ve en las fotografías anteriores, llegaremos hasta un pequeño puente en medio de una doble curva peligrosa derecha-izquierda sobre el río Sieira, que una vez cruzado, empieza la ascensión al Enxa propiamente dicha. El comienzo es realmente duro, ya que la rampa más fuerte de toda la ascensión es esta primera, que se aproxima peligrosamente al 20% puntualmente. Teniendo en cuenta que hasta aquí llegamos después de hacer un descenso de unos dos kilómetros y medio, el hecho de encontrarnos de golpe con estos porcentajes harán que nuestras piernas se resientan un poco. Una vez superados estos aproximadamente 400 metros, llegaremos a la carretera AC-7102, por la que ya iremos hasta el alto. Lo primero que vemos es una carretera de buen asfalto, pero aunque algo más ancha por la que veníamos hasta ahora, sigue siendo bastante estrecha. Subiremos unos cien metros, y dejando a nuestra derecha la senda que nos llevaría a la bonita "Fervenza (cascada) de Ribasieira", tendremos ahora una pequeña zona en la que recuperar fuerzas. Pasaremos por delante de la bonita ermita de "A Madalena" y nuevamente cruzaremos un pequeño puente sobre el río Sieira.

Última parte de la rampa tras cruzar el río

Puente situado tras pasar junto a la ermita de A Madalena

Ahora nos vamos a encontrar rampas más o menos mantenidas en torno al 7% durante casi dos kilómetros. Dejaremos a nuestra izquierda un cruce que nos llevaría hasta las aldeas de Tara y Xufres, para poco después tener que negociar una curva de vaguada. Ahora iremos por una zona muy agradable para pedalear, entre una vegetación casi climácica, flanqueados, por robles, castaños, sobreiras (alcornoques)...

Tramo de la ascensión a la altura del kilómetro 7 aproximadamente.

Las sombras nos protegerán del sol en esta zona.

Antes de llevar dos kilómetros tras cruzar el río por última vez, el desnivel aflojará un poco. Esto coincidirá con el momento en que empecemos a ver los aerogeneradores del monte Graiade y las casas de la aldea de Pousacarro. Esta zona es apropiada para recuperar fuerzas. Dejaremos a nuestra izquierda un cruce sin señalizar, cuya pequeña carretera nos llevaría a la aldea de Bustiguillade. Si torcemos hacia esa aldea, después de cruzarla volveríamos al vial que estoy describiendo y los porcentajes son algo mayores, así que el que quiera afrontar un reto algo mayor, pues ya sabe.

Al fondo los aerogeneradosres de Graiade y la aldea de Pousacarro

Vista de por donde transcurre la ascensión

Cuando pasemos bajo Pousacarro, nos encontraremos dos curvas de vaguada, y otra de herradura, aunque ésta última, situada en medio de las de vaguada, no es muy cerrada y casi no da ni la sensación de ser una curva de este tipo. Una vez pasadas, llegaremos a un cruce situado justo en otra curva de vaguada. Aquí se acabará esa pequeña zona de "descanso".

Curva de vaguada junto a Pousacarro

Bonita parte de la subida a Enxa, pocos metros antes del cruce en la curva de vaguada.

Cruce en medio de la vaguada. Si giráramos a la derecha iríamos hacia Inxerto y Bustoseco, donde muere el vial.

Vuelven los desniveles algo más pronunciados

Tras pasar por esa zona, la vegetación desaparecerá casi por completo, y volveremos a quedar a merced del sol, y también del viento, que en esta zona si que suele pegar con fuerza, ya que nos ponemos a la altura de los montes un poco más bajos y que nos servían de abrigo hasta ahora. Aparecerán nuevos cruces sin señalizar, y cuando lleguemos a otro más amplio, y si señalizado, tendremos las primeras panorámicas sobre la ría de Muros e Noia. En esta zona volveremos a encontrar una pequeña zona de descanso, muy corta, y si el viento pega con fuerza en esta zona conocida como "Chans da Raña" no solo no descansaremos, sino que es posible que suframos más, a no ser que el viento sea del suroeste, que nos daría a favor. Si el que pega es el incómodo nordés... bueno... pues a aguantar.

Zona de rampas al 8-8,5% previas a las Chans da Raña

Recta en las Chans da Raña

Mientras circulamos por la zona de las Chans, seguramente que disfrutando de la compañía de algún caballo en estado semisalvaje, con la ría a nuestra izquierda, y un pequeño valle, y la parte más alta de la Sierra del Barbanza a nuestra derecha, veremos ya de frente la cima del Enxa, coronada por el Centro de Salvamento Marítimo "Fisterra". Lo veremos, si nos deja la niebla, que suele estar presente muchos días del año.

Cuando quede a nuestra derecha un último cruce sin señalizar, pero que es el de la vertiente CIMA del puerto que viene desde Noal y Laranga y aparezca una linea contínua pintada en medio de la calzada, que sirve de guía para los días de niebla cerrada, llegaremos al kilómetro más espectacular de toda la escalada, siendo además el último. Una sucesión de herraduras, alguna con rampas de 14% colgadas sobre la ría, le darán el "toque maestro" a esta empresa en la que nos hemos embarcado.

Comienzo de la parte final. La más espectacular.

Zona frecuentada por cicloturistas

Curva de herradura en la parte final. Al fondo el mar abierto y el lugar de Tarrío.

Bien, pues ya estamos arriba. ¿A qué no ha sido para tanto? Una vez coronado, y si la climatología nos lo permite, podemos disfrutar de las bonitas panorámicas que hay desde donde está el vértice geodésico que marca al monte Enxa.

A la izquierda queda la ría de Noia, monte Louro, los lugares de Muros, Abelleira, Esteiro y o Freixo. De frente la zona que iría a Noia con Portosín y a nuestra derecha las cumbres más altas del Barbanza.

Panorámica desde el Enxa

Y por último, un mapa de por donde transcurre la ascensión: