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Agradecer a Salvador Hernández su ayuda en la configuración de este blog. Gracias Salva.



sábado, 21 de junio de 2014

IRATI XTREM, BAI!!

Perfi de la Marcha
Pues todo empezó hace unos meses, cuando vi que mi amigo Buru iba a acompañar a otro forero de APM, a Ramón (Tuerceradios) a esta marcha, y que otro amiguete, Salva (Vettonia) también iba a ir, así que sin pensármelo dos veces (si lo hubiera hecho, a lo mejor no habría ido) me apunté yo también. Poco a poco la lista de foreros y amiguetes iba creciendo y se apuntaron también Joserra (Gurpegui), Javi (Motoretta) y el otro Javi (Elgolfo).
Lo de que se llame Irati Xtrem tiene su lógica explicación, lo de IRATI, porque discurre casi todo el rato por los Bosques y Selva de Irati y lo de XTREM porque es la ostia...
La preparación que llevo es muy mala, de hecho no estoy ni para un Páramo de Velliza Xtrem, pero con un poco de tesón y fuerza de voluntad, seguro que consigo el mínimo de forma necesario para afrontarla con alguna garantía. Un poco de bici por carretera, bastante de rodillos y alguna que otra cosilla hacen que pierda algo de peso y aunque sin ser un pico de forma óptimo, creo que llego a punto para por lo menos terminar con honor.
El viernes salgo de casa vía Logroño, deteniéndome además en Pamplona a saludar a la familia. Tras tomar un café con ellos y llevarme una torta de txantxigorri, me dirijo ya decidido hacia Otsagabía. 
Al poco de salir de Pamplona, las montañas ya aparecen mucho más altas y se muestra gallarda y esplendorosa ante mi la Higa de Monreal. Mi madriña, si esto solo es el pre-Pirineo...
Paso por Oronz, donde nos quedaríamos hospedados, y junto con Salva, voy hasta Otsagabia a recojer el dorsal y la camiseta de recuerdo.
Camiseta de recuerdo
Con el dorsal que luciría en principio
Una vez allí nos encontramos con Javier (Elgolfo) y su pareja Noemí, que decidió no tomar parte en la Marcha. Sin más que unos saludos y unas cañas, Salva y yo volvemos para Oronz a pillar la habitación y a esperar por el frente madrileño que todavía estaba de camino.
Una vez instalados Salva y yo, bajamos a cenar. Pedazo de cena!!! Si mañana no andamos no será porque no nos alimentaron bien aquí en Casa Iriarte, que por cierto, la guapa chica que nos atendió se parecía un montón a Amaia la protagonista de Ocho Apellidos Vascos.
No tardan ya en llegar los madrileños, que se ponen a cenar rapidamente y subimos todos a la habitación en la que estaremos los 5 y que finalmente no compartiremos con nadie más.
Momento cena
Tras charlar un ratejo y echarnos unas risas, intentamos ya dormir, para poder ir descansados y con fuerzas al día siguiente. Cuesta conciliar el sueño, pero poco a poco vamos cayendo todos.
7:08 suena el despertador. A lavarse y a bajar a desayunar. Si la cena fue de campeonato, el desayuno también fue de Aúpa el Erandio!!
Javi, Joserra y Buru salen pronto hacia la salida, ya que aun tienen que recojer el dorsal y Salva y yo nos damos un poco más de tiempo, pero al final no vamos muy sobrados. Los 5 kilómetros que hay hasta la salida los usamos para ir calentando un poco con la bici.
Cuando llegamos ya están los niños de la Irati Txiki preparados para tomar la salida y enseguida nos encontramos casi todos los APM de la marcha. Parece que el tiempo nos va a acompañar ya que por el momento luce un sol claro.
Ramón (tuercerradios), Javi (Motoretta), Javi (Elgolfo), Ricardo (Buru), Salva (Vettonia), yo (Boirinho) y Joserra (Gurpegui)
Dan la salida y nosotros haciendo fotos. La seriedad caracterísitica de los APM. Al principio vamos muy lentos, detrás de los peques (el futuro) que irán abriendo la marcha hasta Ezcároz, donde se apartarán y nos dejarán ya solos... Nada más cruzar el puente sobre el río Salazar, iniciamos, así en frío, la primera cota del día, el alto de Jaurrieta. No es nada del otro mundo, y además así de inicio pues se hace bien. Da para ir charlando con los compis de cosas hechas ya juntos, y de otras que nos quedan por hacer.
Alguna curva de herradura le da un poco de empaque a estos puertecillos iniciales. Pero desde la salida hay algo que a mi me tiene mosca. Ya viera en el rutómetro que había carreteras en mal estado, también me lo contaran algunos de los que participaron en otras ocasiones, pero cuando ves que la mayoría de las motos de apoyo son quads, y que incluso Cruz Roja lleva por lo menos dos motos de trail... Pues... Mosqueado no, lo siguiente.
Subiendo a Jaurrieta
foto pillada del album Irati de Ane (https://www.flickr.com/photos/bizimartxak/sets/72157645205115801/)
Enseguida coronamos, y descendemos un poco para sin mayor pausa, ir a por el segundo del día, el alto de Remendía. En este puerto vemos que hacia Francia hay unas nubes negras amenazantes y que cada vez hace más fresco. Espero que los fantasmas del Desafío Atlántico no se pasen hoy por aquí.
Pasando por el alto de Remendia
El descenso de este collado ya es más largo, y al bajar pasamos por Abaurrea, Garaioa y Aribe donde termina el descenso y cruzamos el río Irati para encaminarnos pegados a él a por el primer punto serio del día. La carretera por aquí está en perfecto estado, y la única pega es que el aire pega un poco de cara y vemos ya las cumbres de las montañas tapadas por unas nubes cada vez más oscuras.
De momento vamos solos 4 APM, los dos Javis, Joserra y yo, pero poco después de cruzar Orbara vemos al fondo un pequeño pelotón con el que decidimos mantener las distancias, sino en El Muro, va a ser un lío porque se va a hacer un tapón y lo mismo hay que echar pié a tierra.
Así que pasamos Orbaitzeta y llegamos al Muro. Se hace el silencio, primeras rampas serias. Desde abajo, según me iba acercando a él, no puedo por menos que compararlo con la subida del Mirador del Ézaro y me da la sensación de que esta es bastante más llevadera. Estaba en lo cierto, es más corta, con porcentajes (aunque serios, ya que rondan el 20%) más suaves y aunque todo el sea hormigonado, consigo subirlo sin mayores dificultades. Yo creo que más que muro, es una valla.
Subiendo el Muro
El Muro (Foto Gurpegui)
Tras "saltar" el Muro, seguimos por una pista hormigonada hasta el primer avituallamiento del día, situado junto a las ruinas de la Fábrica de Armas de Orbaitzeta. Aprovechamos para estirar un poco las piernas, pillar agua y fruta y comentar que no era para tanto lo que acabábamos de subir.¡¡Qué soberbios somos!!
Foto de Gurpegui entrando en la  Fábrica de Armas

Avituallando

Ruinas de la Fábrica
De aquí salimos siguiendo la misma pista hormigonada, acompañados por el frescor del río, y la verdad es que la zona es chulísima. Da gusto pedalear por aquí, aunque el tiempo cada vez amenaza más con agua...
Estamos ahora subiendo al puerto de Izpegi. Una chulada, y lo coronamos sin mayores dificultades. En el alto paramos a abrigarnos un poco, pero aún no se inicia el descenso del todo. Bajamos un poco y luego subimos a una pequeña cota, situada justo en la frontera franco-navarra en un paraje conocido como Col d'Orgambidé.
Hacia Izpegi
Coronando Izpegi
Llegando a Orgambidé
Coronando Izpegi (Foto Elgolfor)
Iniciamos el descenso, entrando así en Francia... Dios!!! Pedalear en Francia, el país del Tour, de la París-Roubaix, de la París-Niza, la Dauphine Liberé... cuna de grandes ciclistas, donde están puertos que son auténticos Olimpos del ciclismo. Si, estamos pedaleando aquí en la Vieja Europa, en FRANCIA!!!
Uno cuando piensa en Francia y en sus infraestructuras, piensa en grandes y perfectas carreteras... UN BULO!!!! Manipulación de la prensa!!!! La madre que parió al Ministro de Fomento francés. Si ven estas carreteras los de la Xunta de Galicia, hacen de peaje las "Corredoiras dos carros das vacas".
Este primer descenso es malo, muy malo. La carretera está mal y voy frenando un poco con miedo, ya que temo que la cámara de la rueda delantera alcance mucha temperatura por la fricción de la zapata y la llanta y reviente. Por suerte no fue así en mi caso, pero en las cunetas si había bastantes ciclistas que  habían sufrido ese reventón.
Terminado el descenso hay un avituallamiento líquido en el que no paro y voy hasta donde un miembro de la organización nos para porque hay un giro brusco de casi 360º hacia la derecha y nos dice que esperemos que hay tal tapón de ciclistas al encontrarse con un rampón muy duro, que se están cayendo algunos y que pasemos con cuidado y poco a poco, no apelotonándonos.
Las presentaciones con este puerto no pueden ser más impactantes. Así, sin conocernos de nada, nos ofrece un rampón bestial... Encantado señor Artaburu-Errozate.
Subiendo Artaburu
El puerto lo inicio con Javi Motoretta, pero yo decido guardar un poco, y Javi se me va yendo poco a poco, no pasa nada, no hay prisa; no trabajo hasta el miércoles. Meto todo el hierro que llevo desde abajo, y es que más vale que sobre una caja que no que falte una botella. En la curva de herradura que se ve al fondo en la foto anterior me adelanta un ciclista con el maillot de U.C. Rodadores, pero me fijo y los guantes son de APM, así que decido llamar su atención para ver de que forero se trata. Se presenta como M.A. Granero. Mucho gusto. Un nuevo cromo para la colección, esta vez del Levante.
Poco a poco voy encontrándome mejor y voy remontando puestos. Bien. Las sensaciones que llevo son muy buenas. En una zona de curva de herraduras llamada Sommet de Arthé veo una granja que pone no se que de Fromage... Ummm la tentación de quedarme y degustar algún queso de oveja francesa es grande, pero hay que tirar para arriba, que hemos venido a lo que hemos venido.
Poco después me parece ver a lo lejos un maillot APM, así que decido apretar un poco para ver si le doy alcance. Se trata de Gurpegui, al cual doy alcance justo antes de llegar a la que quizás sea la rampa más dura del puerto. Lo hice adrede para que me sacara estas dos fotos desde atrás:

Al fondo rampón al 23% y a la izquierda el pico Arthaburu
Una vez negociada esa rampa del demonio, la cosa afloja un poco, tampoco mucho, pero da para recuperar algo y coronamos el Col de Artaburu, pero nosotros seguimos subiendo otros dos kilómetros, hasta llegar al alto de Errozate. Nada más dejar atrás Artaburu, la niebla nos engulle y el viento sopla con mucha fuerza. La carretera está fatal, con tramos descarnados y grandes socavones... ¿cómo será el descenso?
Por fin llegamos arriba donde paro a ponerme los manguitos y abrigarme un poco, que hace mucho frío.
Alto de Errozate

Gurpegui y sus molonas gafas de vacileta.
Venga para abajo, pues. Si el descenso anterior fue malo, este es criminal. Curvas de herradura muy cerradas, baches más grandes que algún piso de VPO, la ambulancia atendiendo a un herido en una curva... Y la carretera no es que no cupieran dos coches, no, es que no cabía uno!!!!
En medio del descenso, tras una curva de vaguada sobre la que se apostaban cientos de ovejas, se presenta un rampón hacia arriba de aúpa. Empiezan a sonar los cambios, a oírse algún "uuuuuyyyyy mis piernas...." Por suerte no es muy largo y el descenso continúa por esta ¿carretera?. Al igual que la otra vez, llegamos abajo y un nuevo cartel de Comienza Puerto. Es que ni un metro llano!!!
Poco después, un nuevo avituallamiento y en este si que paro, y mi compi Gurpe, también.
Avituallamiento
Una vez avituallados de nuevo, seguimos ruta, por una carretera estrecha, pero que parece está en bastante mejor estado que la anterior, por lo menos por ahora. Este nuevo collado que subimos ahora se llama Surzai Lepoa (Lepoa debe ser collado en euskera).
El gran Gurpe
Increíbles parajes. Foto Gurpegui
Este puertecillo que vamos subiendo ahora no es muy duro, pero los kilómetros van pasando factura. Coronamos bastante bien y nos lanzamos para abajo, si bien este descenso no es ni muy largo ni muy empinado. Aún así, en el descenso Gurpe me deja atrás. El pasar por la UVI alguna vez, hace que el freno y tu seáis buenos amigos y tengáis una relación estrecha. Aún así adelanto a varios ciclistas bajando, y es que el miedo es muy libre.
Llegamos a una carretera ancha y bien asfaltada, en un valle con una pequeña presa. Este lugar se le conoce como el Chalet de Pedro. Enseguida giramos a la derecha, y enfilamos hacia un nuevo puerto de montaña, el Col de los Chalets de Irati. Al principio todo guay, con esos cartelitos que tienen los franceses cada kilómetro en las cunetas de sus puertos con el dibujo de un ciclista, la altitud a la que estás y a la que coronas y el porcentaje del kilómetro siguiente... El capullo que puso estos carteles aquí es un graciosillo... Kilómetros al 5%???? Y una mierda!!! Yo creo que desde abajo giñaba un ojo, levantaba el pulgar y decía "Asín a ojo.... un 5% más o menos" Porque es que si no no se entiende. Rampones por encima del 12-13% con un último kilómetro muy duro. Menos mal que el lugar es una pasada de chulo y se lleva mejor con eso.
Y en el alto, un nuevo avituallamiento donde además damos alcance a los Javis.


Subiendo a los chalets de Irati
En este avituallamiento nos encontramos con un histórico de APM, el gran Javi Fuertes. Que gozada. Un honor saludarle. Justo cuando vamos a salir aparece Salva... Oe oe oe. Decidimos esperar que se avitualle un poco e ir juntos. 
El descenso de este puerto, que por esta vertiente es el famoso puerto del Col de Bagargui, es increíble. Larguísimo, y combina curvas cerradas con largas rectas donde yo, sin conocerlo de nada, llego a superar los 70 kms/h. El puerto es una pasada de bonito, super escénico. Para disfrutarlo. Ahora, si en vez de bajar, tocara subirlo... no se yo el disfrute. Pero lo que teníamos nosotros por delante... iba a ser más duro!!!
Una vez más, termina el descenso, y comenzamos a subir. 


Primeras rampas de este coloso pirenáico
Pues nada, vamos a subir Larrau, a ver que pasa. Aquí Miguel Induráin pidió papas en la etapa 17 del Tour del 96 ante Bjarne Riis, perdiendo muchísimo tiempo. Pero quién dijo miedo??? Ahí vamos Salva, Joserra y yo a dar buena cuenta del puertecico en cuestión.
Entrada al pueblo de Larrau

Este puerto y con tantos kilómetros en las piernas no es apto para todos los públicos
 

Valladolid no es el terriotrio ideal para entrenar esto...
La serie de fotos anteriores son de Joserra (Gurpegui)
Los siete primeros kilómetros son muy duros, con cinco kilómetros completos por encima del 10% de desnivel. En un primer collado, se corona Erroimendi, y viene a continuación un pequeño descenso en el que se puede recuperar algo. Pero el kilómetro que llega aquí, es muy engañoso, porque cuando se inicia ese kilómetro, el cartel pone que es al 4,5% de media, pero claro, la mitad de ese kilómetro ya es en descenso, con lo que la otra mitad hasta Erroimendi es muy duro, tanto como que tiene un rampón al 16%.

Antes de llegar a este collado, me sacan alguna fotillo.

Ya se ve el alto del puerto de Larrau, y yo voy echando mis cuentas... ¿Cómo puedo llegar allá arriba en poco más de un kilómetro que queda? Asusta de pensarlo. Y la respuesta es: Pues con unos rampones que te cagas!!!!
Foto desde el alto hecha por Elgolfor
Yo voy sufriendo, bajo la atenta mirada del Pico Orhy, pero aun soy quien de seguir charlando con los ciclistas que voy o que me van alcanzando e incluso de bromear, pero es que el hecho de ver tan próximo el final del puerto da una alegría terrible. Al final me llevó 1:20:24. Que vienen siendo 40' menos que lo que me llevó subir Fonte da Cova en Valdeorras, si bien este puerto también son en su parte cronometrada, 16 kilómetros menos. (Fonte da Cova son 28 kilómetros)
Del album Flickr de Ane, robé esta foto...
A punto de coronar Larrau
Menudas chepadas que di! Así acabé con las lumbares, pero con el orgullo de subirlo de abajo a arriba sin echar pie en ningún momento. Aúpa el Marce!!!!
Arriba en el alto hace mucho frío por culpa de la niebla y el viento fuerte que pega. Mi relojito marca una temperatura de tan solo 7ºC
Así que bebo un poco de agua, como unos cacahuetes y para abajo... para la meta!!!
Al fondo el alto de Larrau desde Erroimendy
Zona de descanso
Alto de Larrau. Entramos de nuevo en Navarra
El descenso de este puerto no tiene nada que ver con los que hicimos por Francia. Lo único al principio el fuerte viento que pegaba sobretodo a la  altura del Pikatúa junto a la antigua aduana donde hizo que la bici se me fuera de un lado a otro de la carretera, y el paso arriba por el túnel. Pero nada, se baja muy bien, tanto es así, que el único bache del descenso lo atravesé por el medio. Ya total, por uno más.
Casi de la mano entramos en meta Salva y yo, donde ya estaban los Javis junto con Noemí esperando por nosotros. Saludo a unos animadores que me agencié durante la marcha, que realmente iban a animar a un colega suyo, pero como hicimos juntos buena parte, me los pillé yo también y al final acabaron apoyándome más a mi que a su colega y me felicitaron por dejarle atrás al final. ¡Qué gente más maja y enrollada te encuentras en estos sitios!
Bueno, pues se acabó, ahora solo queda esperar por el resto de los miembros de la manada e ir a comer algo.
Tras cruzar la meta
Recuperando fuerzas
Esperando por el resto (Foto Elgolfo)
Como un grupo de indignados... (Foto Elgolfor)
Mientras estamos ahí descansando un poco, se inicia la entrega de trofeos. Yo mantengo la esperanza de que me den uno, que nervios!!! Pero resulta que aquí no dan a la categoría que yo optaba, que era la de primero de Boiro. Que lata!!! En las carreras de Boiro si que dan premio al primero, segundo y tercero de allí...
Si hubiera premio al cicloturista más distante... no se yo.
Con el planchazo de no llevar premio alguno (es broma, claro), nos vamos despidiendo ya de elgolfo, Noemí y Ramón y su familia. Luego volvemos a cojer la bici y a realizar los 5 kilómetros hasta el albergue... Menos mal que el aire daba a favor.
Duchita, cenamos y los más valientes, o sea, Motoreta, Gurpe y yo, nos vamos luego por la noche a tomar algo a Otsagabia...
Kalimotxo bat, mesedez
Bueno, tampoco nos enjarrillaremos demasiado, que al día siguiente hay que madrugar y algunos hasta tienen planes de subir algo más con la bici. A mi me esperan casi 9 horas de coche hasta Boiro...
Volvemos al albergue, y al día siguiente, besos, abrazos y organizar próximas quedadas y cada mochuelo a su nido.
HA SIDO UN AUTÉNTICO PLACER!!!!

miércoles, 11 de junio de 2014

Crónica de una mojadura anunciada. Desafío del Atlántico 2014


Estaba cantado. Nos íbamos a mojar, y lo sabíamos como dicen los Memes de Julio Iglesias.Yo el viernes por la noche tenía claro que no iba a ir. Para la semana siguiente tenía mi gran reto de la temporada, La Irati Xtrem, y no me la quería jugar y perder.
El sábado por la mañana me despierto y seguía teniendo claro que no iba a salir. Daban temporal, y así se lo comuniqué por whatssap a varios amigos, pero... y ¿si voy a ver la salida? Venga, va, me acerco hasta Ézaro para verles salir y de paso saludar a algún colega que hace mucho que no veo.
Termino el desayuno y me preparo para acercarme hasta allí... Pero, ya que voy,... porque no me llevo la bici, no sea que llegue allí y la cosa no esté tan mal como dicen... Venga, un petate rápido con la ropa, el casco y a por la bici.
Monto en el coche y marcho con la idea de no tomar la salida. Hay muchas nubes sobre Boiro y amenaza agua. Si aquí está así, en Muxía y Dumbría no quiero ni pensarlo.
Llego a Noia, nublado, Serra de Outes, nublado, a Pino do Val, muy nublado y frío, a Paxareiras... niebla, pintea, ventea... bueno carallo, así no salgo ni para atrás.
Desde uno de los miradores de Paxareiras (el de abajo) y la playa de Carnota al fondo.
Bajo hasta O Viso y ya arrimado a la costa, por Caldebarcos, O Pindo... llego a Ézaro. Vaya, está en nubes y claros, pero un viento exagerado. Venga, voy a acercarme hasta el control de firmas y recojo los obsequios a la vez que sigo whatsappeando con los colegas, diciéndoles como está el tema. Llego al control y aprovecho para saludar por primera vez al Piru, a Jose Manuel Vázquez, a Ezequiel Mosquera y su mujer Miriam, a Marcos Pereiro, a Gustavo César Veloso... saludos rápidos, porque son gente con muchos compromisos y no quiero entretenerlos lo más mínimo.
El gran jose Manuel Vázquez en el control de firmas
Venga, con el dorsal y lo demás me vuelvo hacia el coche a ritmo de whatssap. Y en uno de ellos me llega un "sino sales eres un tío blando". Cagüen zozt!!!! Tío blando yo... A disfrazarse de ciclista y a hacer que se traguen esas palabras. Tío blando yo... Blando el Bimbo si acaso, pero el Boirinho NO!!!! No te jode...
Mientras preparo todo, es esta vez el bueno de Eze el que se acerca a charlar un poco conmigo y a contarme que tiene un nuevo plan para el futuro con un grande del cicloturismo... y hasta aquí puedo leer. Mucha suerte. Os la merecéis los dos.
Con el campeón. Foto dedicada a mi amigo Motoretta
Venga, para la salida zumbando que va a ser la hora. Llego a tiempo bien, ya que los campeones de Vilagarcía y Moaña, Gustavo César Veloso y Delio Fernández aún están en el camión siendo entrevistados y animando desde allí a los participantes. Se respira ciclismo... Luego lo de respirar sería ya una proeza.

Momentos previos a la salida
Con una traca de cohetes, (No se donde habrá más afición a la pirotecnia, si en el Levante o aquí) se da la salida. Agárrense los machos!!!!
Salimos a la carretera AC-550 y nos dirigimos hacia Cee. No llueve, pero ventea que da gusto y los hasta ahora pequeños descensos son un poco nerviosos. Pasamos por Cee, y empieza a caer alguna "pinga" pero nada serio. Será cuando estemos enfilando hacia el cabo de Touriñana (que pena no ir hasta Nemiña y acercarnos más por los balcones de la carretera que van a dar a la aldea de Campos) cuando ya empiece a caer agua. Me resisto a ponerme el chubasquero con la esperanza de que sean cuatro gotas, pero en Lourido ya se ve que no va a ser una de esas chaparradas express, así que a ponerse el "plástico".
El Atlántico entre Cuño y Lourido
 

Llegando a Muxía
En Muxía hacemos un acercamiento hasta la punta da Virxe da Barca, Zona 0 de la catástrofe del Prestige, donde me fue imposible hacer una foto con la que estaba cayendo. Llego a la zona de la lonja en el puerto y descanso en el avituallamiento. Viene bien comer e hidratarse algo, pero hace mucho frío y la gente tiene ya ganas de salir. Empieza a haber nervios.
Porto de Muxía
Salimos por fin, y poco después se llega a la zona de Salida Lanzada y Tramo Libre. Como si para dar esa salida hiciera falta, el cielo puso algo de su parte. Un trueno!!!. Venga, esto promete.
La zona del pelotón en la que voy yo parece que no tenga muchas ganas de batalla. Llueve mucho de nuevo, de vez en cuando graniza, vamos tranquilos. Cuando de repente oigo... Eh, eh!!! Ese APM, ¿quién eres? El se presenta como Naval, un forero de Lugo, y yo pues como Boirinho, el otrora activo forero, pero que ultimamente está muy pasota. Pero muy bien, un placer, y un nuevo cromo apeemero para la colección.Y es que APM es como Mayoral; hace amigos. Lo que han conseguido los buenos de Ander Guaza y Juanto Uribarri tiene mucho, pero que muchísimo mérito.
Poco a poco nos vamos metiendo ya en el concello de Dumbría. Esto empieza a convertirse en un infierno. Aquí quería ver yo al Coronel Truman... se caga por la pata abajo.
Esto ya no es llover, esto es jarrear con todas las ganas. En la zona alta, un poco antes de Hospital, junto a la fábrica de Ferroatlántica verdaderos ríos de agua con barro cruzan la carretera de lado a lado. Empiezan las primeras deserciones. Gente que se va de la carrera por su cuenta hacia Ézaro... Buff, tampoco será bueno irse de la carrera así de este modo con el día que está. Al final nos paran en un albergue en Hospital para reagruparnos e ir de forma controlada ya hasta meta. Aprovechamos para comer y beber pero hace mucho frío. Los nervios cada vez están más a flor de piel y la cosa empieza a ponerse seria. Yo quiero comprender a ambas partes, a los que queremos salir cuanto antes, porque el riesgo de hipotermia (no exagero) está latente en algún caso. Pero también me pongo del lado de los organizadores. El día se ha puesto muy malo, ni las más pesimistas previsiones diseñaban un marco así, y se que los miembros de la organización también tienen que estar sufriendo. Somos casi 300 ciclistas que se están enfrentando a unas condiciones metereológicas muy adversas y no todos vamos a reaccionar de la misma forma. Yo me veo con una pulmonía y temiendo por mi Irati Xtrem.
Un miembro de la organización haciendo un llamamiento a la calma
Por fin salimos... y de nuevo nos cae lo que no está escrito. Esto es increíble. Que faltan menos de 15 días para el verano por Dios!!!! Y esto se parece mucho a una de esas interminables ciclogénesis que sufrimos este invierno o peor. De hecho luego me enteré que hubo destrozos en varias zonas de la Costa, incluso más al sur, como en  Ribeira por culpa de un tornado.
Lo más tranquilos que podemos, vamos avanzando junto al Xallas, hasta llegar al embalse de Santa Uxía, donde otros pocos deciden retirarse y bajar directamente hacia Ézaro.
Yo al final me digo, que ya que estoy aquí, pues la acabo, total, más no me voy a mojar. Cruzamos sobre la presa, que era una inmensa balsa de agua, ya que no se veía nada el asfalto; era todo un charco gigantesco, y comparto unas palabras con otro ciclista de Santiago sobre otro que va justo delante de nosotros y que va con zapatillas de paseo y rastrales en los pedales. Según vamos comentando el mérito que tiene este chico, se le rompe la cadena en la rampa más dura de la subida a Fieiro y se cae junto a mi. Consigo esquivarle. Por suerte parece que no ha sido nada y se levanta enseguida. Sigue tronando, y para que la fiesta no decaiga, pues la guinda; dos perros deciden salir a animarnos con sus ladridos y meterse en medio del grupo.
Carretera hacia el embalse de Santa Uxía
De repente algo me pasa a una velocidad endiablada. ¿Que carallo era eso? ¿El sputnik? No, era Gustavo César Veloso. Poco después a toda leche iría también Delio. Aúpa ese equipazo del OFM/Quinta da Lixa. Ojalá os pudiéramos ver en La Vuelta.
Llegamos al momento que más temía del día. La bajada de Paxareiras. Por suerte en ese momento no llueve (milagro) y por lo menos bajamos casi en seco, pero hace muchísimo viento y la bici baja muy nerviosa. Se me hace eterno el llegar hasta la zona en la que el arbolado nos protege un poco. Termina el descenso y una vez en la carretera general, intento unirme a algún grupillo para ir más cómodo. Pero esto es un auténtico rosario. Yo avanzo a una velocidad que me sorprende a mi mismo. Cierto es que el aire sopla a favor, pero sopla para todos y sin embargo voy escalando puestos y aunque alguno intenta cogerme rueda, se acaba quedando. Toma, ya soy todo un rodador. Es lo que tiene entrenar por los páramos vallisoletanos.
La mole de O Pindo ya nos recibe y tras él aparece amenazador el Mirador de Ézaro.
Ala venga, otra vez a llover. A subir rampas del 30% con suelo mojado. Las cuerdas, los arneses y el piolet me los dejé en casa... A ver que pasa.
Empiezo a subir... Y bufff, ya no se si hago eses, zetas, uves dobles... me retuerzo... El que diseñó está carretera odia a los ciclistas... Madre que lo parió!!!
En lo alto del Mirador!!! Si si, pone 30%
Más mal que bien llego por fin arriba... DESAFÍO CONCLUÍDO!!!! ¿concluído? Aun quedaba una sorpresa de última hora. Bajando hacia el coche para cambiarme y ponerme de una vez ropa seca, empieza a caer otra granizada de consideración. Duele en la cara, casi no podemos ver por donde bajamos, montones de ciclistas andando con la bici de la mano hacia arriba... Esto es épico. Desafíamos al Atlántico y el Atlántico decidió atajar tamaña afrenta y se nos echó encima literalmente.
Por fin llego al coche a cambiarme. Vuelve a caer una chaparrada increíble. Es como si tiraran el agua a calderos... La bici está fuera, pero ya tengo la ropa seca puesta y así no voy a salir del coche... 
Pasan unos minutejos y parece que escampa... voy a guardar a mi pobre Pinni.
Llamo a casa para indicar que sigo con vida, y que voy a acercarme a la carpa a comer algo.
Recojo mi medalla como reconocimiento al Mérito Naval.. ah no, como reconocimiento a acabar este Desafío. Es que con tanta agua ya pensaba que en vez de en bici iba en una fragata.
Por fin, seco, consigo sentarme a comer y reponer fuerzas. Una rica ensalada de pasta y unas piezas de churrasco buenísimo con un suculento criollo. Increíble todo lo que ofrece esta marcha por los 15 euros que costaba la inscripción. 
Mientras como, vuelve a tronar y a jarrear, pero ahora que estoy a cubierto... Si chove, que chova.

Resumiendo, un día de perros, pero aun así tengo que reconocer que... DISFRUTÉ!!!! Que coño. Como dicen por ahí, nadie nos dijo que fuera fácil; si lo fuera, sería fútbol, Y otro dicho muy bueno que rula por los foros ciclistas: Hasta que el cuerpo aguante, somos personas. A partir de ahí somos ciclistas.
Y de verdad, salí de Ézaro encantado. Me sentí ciclista... Es como si estuviera en la etapa del Gavia y el Stelvio del Giro. No se como explicarlo, pero me sentía enorme. Un poco preocupado por si me acatarraba, pero contento.
Y a los que leáis esto y no hayáis realizado el Desafío. Animaros, no os arrepentiréis. La organización se vuelca con nosotros, nos ofrecen mucho a cambio de muy poco. El paisaje rural coruñés no muy conocido, pero también lleno de belleza nos presenta bellas estampas. Es una marcha muy recomendable, así que espero veros el año que viene por estas carreteras, que seguro no estarán tan encharcadas como este año.
LARGA VIDA AL DESAFÍO!!!!
E dis de subir ata alá arriba?
E ti sei que me fodes!